Catherine Aiello

En algún momento a fines de 2019 comencé a recibir correos electrónicos de Caviar, una aplicación/ servicio en línea de entrega de comidas. Alguien con mi nombre abrió una cuenta y escribió mi dirección de correo electrónico por error, por lo que cada vez que pedía comida para entregar (en Filadelfia), recibía un correo electrónico de "Caviar Support" que me alertaba que mi comida estaba "en camino".  o "había sido entregado" Al principio los eliminé o pensé en tratar de contactar a la compañía. Pero siguieron llegando y finalmente cedí a la tentación de convertirlo en un proyecto. Cuando fui a Filadelfia a fines de febrero, visité los restaurantes en los que "Catherine Aiello" había comido durante ese mes, pedí lo que había comprado e hice dibujos de cada artículo. Disfruto de los proyectos que me permiten entrar en la realidad de otra persona, especialmente cuando no sé nada sobre ellos. En el trabajo, he preparado un sinfín de pedidos de entrega de Caviar e interactuado con los conductores que vienen a recoger la comida. Pero nunca he tenido una cuenta de Caviar, nunca he pedido comida a través de ellos. A través de esta extraña coincidencia y el proyecto resultante pude ver diferentes lados de una interacción de servicio.